
Desafío de la industria metalúrgica #18: La grasa en el sistema de refrigeración genera altos costes
Cuando la grasa entra en el sistema de refrigeración, conlleva costes significativos. El tratamiento del agua, los cambios de filtro y el mantenimiento se acumulan, sin mencionar los problemas de salud y seguridad.
Los retenes mantienen los lubricantes dentro y los contaminantes fuera
Muchos de nuestros clientes utilizan rodamientos abiertos en sus coladas continuas, a menudo por tradición o hábito. Sin embargo, el uso de rodamientos abiertos implica el riesgo de que ingresen contaminantes en los rodamientos y que la lubricación se filtre hacia fuera.
La fuga de grasa es costosa
A menudo, observamos que los rodamientos abiertos filtran grasa hacia el sistema de refrigeración. Esto implica costes considerables por tratamiento del agua, cambios de filtro, mantenimiento, etc. En un ejemplo de uno de nuestros clientes, el precio de compra de la grasa es de 4 €/kg, pero cuando se suman los costes de gestionar la grasa en el sistema de refrigeración, el coste final es de aproximadamente 12 €/kg.
Los rodamientos obturados evitan las fugas
Con los rodamientos obturados se puede evitar la fuga de grasa. Cuando se mantiene la grasa en el rodamiento, menos grasa llega al sistema de refrigeración, lo que significa que se necesita menos agua. Cálculos recientes muestran que se puede ahorrar hasta un 20% en los costes de reciclaje de agua y un 20% en el consumo de agua cuando se utilizan rodamientos obturados.
Evite la contaminación y la humedad en el rodamiento
Los retenes no solo mantienen la grasa dentro del rodamiento. También mantienen el rodamiento libre de contaminación y humedad, lo que mejora significativamente el rendimiento del rodamiento con menos demanda de grasa.
